Cuando Bauti, mi hijo mayor, era más chiquito, miraba continuamente un dibujito animado que tenía como latiguillo “no te esfuerces demasiado”; en relación a que, si se notaba que uno estaba poniendo demasiado empeño en lograr algo, quedaba ridículo… como en una posición forzada. Ya desde el principio a mí me disgustó ese concepto, pero […]
compromiso, cuentos de fútbol, educación, esfuerzo, padre e hijo, padrino, valores
Comentarios recientes